El caso de contar MACROS

Quieres perder peso y grasa. ¿Confundido?. Es normal.

Quieres ganar masa muscular. ¿Confundido?. También es normal.

Estamos bombardeados por información sobre nutrición. Keto, bajo en carbos, bajo en grasas, basado en plantas, ayunos…Todos dicen tener la solución mágica para lo que buscas. Y la verdad es que cualquiera de esas estrategias puede darte resultados en tu composición corporal y salud si las sigues de buena manera.

Pero, ¿qué te parecería comer según tus gustos y preferencias? 

Balance energético 

Si tu objetivo es perder peso y grasa, o ganar masa muscular, o mantener tu composición corporal, una de las piezas claves para lograrlo es consumir las calorías que te van a permitir lograrlo.

  •           Si consumes más calorías de las que gastas, vas a ganar peso

  •          Si consumes las mismas calorías que gastas, vas a mantener tu peso

  •          Si consumes menos calorías de las que gastas, vas a perder peso y grasa

Esta ecuación calorías dentro – calorías fuera (CICO) es una forma muy simple de mostrar un sistema extremadamente complejo. En cada lado de la ecuación hay múltiples variables. Algunas bajo tu control, otras no.

Qué y cuánto comemos parece simple y bajo nuestra voluntad, pero la señalización de apetito y saciedad es muy complicada. Nuestro ambiente también influye de manera importante en lo que comemos.

Nuestro gasto energético es la suma de nuestro metabolismo basal, del efecto térmico de los alimentos, y de nuestra actividad física (programada y no, voluntaria e involuntaria).

La ecuación no es estática, está en constante movimiento. Cada lado afecta al otro. Subir o bajar de peso va a repercutir en ambos lados de la balanza. 

¿Porqué contar macros?

Las calorías entonces son clave para cambiar tu composición corporal. Esto es cierto, aunque a algunos no les guste.

El problema es que no sabemos cuánto comemos, ni menos lo que tenemos que comer para alcanzar nuestros objetivos. Somos muy malos reportando lo que comemos (reportamos de menos). Además, tendemos a sobreestimar las calorías que realmente gastamos.

Contar macros soluciona este problema. Hace objetivo y cuantifica lo que antes desconocíamos. Disminuye el error de lo que creemos comer y lo que realmente estamos comiendo.

Contar macros no sólo asegura que vas a consumir la cantidad de calorías necesarias para conseguir tu objetivo, sino que también los macros necesarios para optimizar el resultado.

¿Ya te dije que no hay alimentos prohibidos?. No los hay. Al contar macros privilegiamos que la mayoría de nuestra alimentación venga de productos reales y ricos en nutrientes. Pero dejamos espacio para algunas cosas que nos gustan y nos hace felices comerlas.

Contar macros no es para todos (como todo en nutrición). Pero, quizás es la solución y herramienta que estabas buscando para alcanzar tus objetivos sin renunciar a tu vida personal y social.

¿Tengo que contar macros siempre?. No.

Contar macros es una excelente herramienta de educación nutricional. Cuenta macros cuando tengas un objetivo específico. El resto del tiempo pon en práctica lo que aprendiste, y estima basándote en tu experiencia.

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Adaptación Metabólica